Este martes 13 de julio se conmemora el Día Internacional del Déficit Atencional e Hiperactividad, trastorno que en la actualidad afecta a 1 de cada 10 niños o jóvenes en el mundo.
El Déficit de Atención es uno de los trastornos más comunes que se diagnostican en la primera infancia y que generalmente afectan todo el desarrollo posterior de la vida adulta, además que muchas veces este diagnóstico es incomprendido en el sistema de educación regular. Esta patología afecta al 5% de los niños en edad escolar, pudiendo llegar hasta un 40% de ellos, a continuar padeciéndolo en la edad adulta.
Es por eso la importancia de conmemorar esta fecha, donde la consigna es lograr una mayor concientización de las necesidades actuales de los niños y sus familias, ya que este trastorno de no ser tratado a tiempo, puede complicarse y ser más difícil de resolver, pudiendo producir otros trastornos en la personalidad del niño, adolescente y adulto, como baja autoestima, depresión, ansiedad, fracaso escolar, inadaptación, entre otros.
Sobre los síntomas, cabe destacar que un niño con déficit atencional suele tener mucha dificultad para prestar atención, se le olvidan las cosas, se mueve constantemente, le cuesta permanecer sentado, habla mucho y actúa sin pensar, y tiene dificultades para esperar su turno e interrumpe al otro.
El método de diagnóstico es fundamentalmente clínico, considerando los actuales criterios del DSMV y descartando cualquier otro trastorno que pueda afectar la atención. También es importante la entrevista clínica del niño, su comportamiento en casa y en sala de clases. Esto último muy importante en cuanto a la comunicación con el profesor y colegio.
Todo niño merece y puede avanzar en su desarrollo, solo requiere de una sociedad empática y de realizar intervenciones en forma interdisciplinarias y a temprana edad.